
Columnista
Esta película ya la vimos, reiteradas veces
El bono otorgado por Gildo Insfrán a toda la administración pública, no es un regalo ni tampoco una muestra de sensibilidad social ; es el más claro certificado de que la provincia cuenta con recursos y goza de superávit fiscal

Y como no contar con recursos y gozar de superávit fiscal, si al igual que el gobierno nacional acumula dinero y no distribuye ni en obras ,salud, educación, seguridad, ni tampoco en inversiones que signifiquen la generación de fuentes de trabajo genuinas y sustentables.
Mucho menos en el paupérrimo porcentaje de dinero que coparticipa a municipios del interior.
Al mismo tiempo es un reconocimiento tácito de la mendicidad de los salarios públicos y del terrible mazazo que significó para todos los formoseños, el exponencial incremento en el costo de la energía eléctrica, aumento donde hipocritamente esquiva la responsabilidad y esconde la verdad de que el Cuadro Tarifario Provincial es de su autoría.
El Bono no es un Regalo, es lo que por derecho le pertenece al formoseño , ya que es producto de la acumulación, de múltiples necesidades y de innumerables padecimientos -incluida la mayor Tasa de Mortalidad Infantil del país - que un gobierno democrático, teniendo la solución a disposición, jamás hubiese permitido.
Como corolario de este "desprendimiento" y como es natural, seguidamente estará el eterno agradecimiento Al Supremo, por parte del "Club de Intendentes " que destacarán su consabida sensibilidad con la que les garantizará que ellos también puedan otorgar "el regalo".
Esta película ya la vimos, reiteradas veces.
