La justicia electoral dio ganador a Maduro y la oposición denunció un escandaloso fraude
Los sondeos habían anticipado un amplio triunfo de Edmundo González; el chavismo se aferra al poder pese a la fuerte presión internacional

A pesar de una intensa presión de la comunidad internacional, una jornada electoral que había sido vista como un momento bisagra en la historia de Venezuela ante la posibilidad real de un cambio que acabara con 25 años de chavismo culminó con el régimen de Nicolás Maduro adjudicándose el triunfo ante el candidato de la coalición opositora Plataforma Unitaria Democrática (PUD), Edmundo González Urrutia, que denunció un fraude.
"No pudieron con las sanciones, no pudieron con las agresiones, no pudieron con las amenazas y no podrán jamás con la dignidad del pueblo de Venezuela", dijo Maduro luego de ser proclamado ganador de las elecciones. "El fascismo en Venezuela, la tierra de Bolivar y Chavez no pasará, ni hoy ni nunca", agregó.
En lo que muchos venezolanos veían como una "última oportunidad" para patear el tablero y negarle la continuidad en el poder al chavismo, las elecciones de Venezuela dieron paso a un escenario de incertidumbre en el que se desconoce el accionar que adoptaría el gobierno ante una sociedad movilizada por lo oposición para defender la voluntad popular en las calles. Con Maduro por al menos seis años más en el poder, el autoritarismo del régimen que ya ha dejado más de 300 presos políticos en esta campaña electoral se fortalece, en un país que quedará aún más aislado del mundo tras reiterados llamados de la comunidad internacional a respetar la decisión de los votantes e inmediatos descréditos del resultado.
Más de dos décadas de chavismo dejaron a un país con más del 69% de la población bajo niveles de pobreza multidimensional, con una economía que perdió el 80% de su PIB y enfrenta una inflación galopante, un sistema de salud colapsado y la mayor crisis migratoria de la región, con más de 7,7 millones de venezolanos desplazados en busca mejores condiciones de vida. Este nuevo capítulo en la historia del país mantendrá alerta a la región ante lo que podrían ser una nueva oleada migratoria masiva. Un reciente sondeo de la encuestadora Delphos arrojó que una cuarta parte de la población estaba pensando en migrar si el oficialismo se mantenía en el poder.
Pasada la medianoche, el presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) Elvis Amoroso, transmitió el primer boletín con el 80% de las mesas escrutadas una tendencia "contundente e irreversible" a favor del presidente Nicolás Maduro con el 51,2% de los votos (5,1 millones de sufragios), frente a un 44% (4,4 millones de votos) de Edmundo González.
Las autoridades de la oposición indicaron en un primer momento que sus representantes de la campaña apenas pudieron acceder a un 30% de las actas escrutadas, en las que afirmaron que González desterraba a Maduro.
"Queremos decirle que Venezuela tiene un nuevo presidente electo que es Edmundo González Urrutia. Ganamos y todo el mundo lo sabe", dijo la líder opositora María Corina Machado en un mensaje desde su comando de campaña junto al candidato.
"Tres conteos rápidos dieron los mismos resultados que los boca de urna. Tenemos más del 40% de las actas. El 100% de las actas que transmitió el CNE las tenemos. No sé de donde salieron las otras. Y toda esa información coincide en que Edmundo obtuvo el 70% de los votos y maduro, el 30%", agregó Machado.
"No vamos a aceptar ese chantaje que la defensa de la verdad es violencia. No señor, violencia es ultrajar la verdad. Violencia es lo que pretenden hacer. Nosotros vamos a defender la verdad", afirmó Machado, y volvió a pedir a los fiscales que se queden junto a las actas en los centros de votación.
"Nuestra lucha continúa y no descansaremos hasta que la voluntad del pueblo de Venezuela sea respetada", dijo, por su parte, el exdiplomático González, que previamente declaró en una breve publicación en X: "Los resultados son inocultables. El país eligió un cambio en paz".