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Gravísima denuncia: custodia de Gildo Insfrán atropelló y mutiló a una mujer discapacitada tras amenazarla de muerte

En un nuevo y estremecedor caso de violenci apolicial vinculado al poder en Formosa, Patricia Díaz, una mujer discapacitada, denunció en Radio Parque haber sido atropellada intencionalmente por Nelson Ortiz, custodio personal del gobernador Gildo Insfrán. Según el relato de Patricia, el ataque fue precedido por amenazas explícitas y terminó con una brutal agresión que le destrozó los dedos del pie.

Díaz reveló que Ortiz, conocido en su entorno como "peso pesado" por su cercanía con Insfrán, la amenazó directamente afirmando que la "iba a hacer reventar" y que no se molestara en denunciar porque, según él, su posición como guardaespaldas del gobernador lo hacía intocable.

El cumplimiento de la amenaza

El calvario escaló cuando Patricia regresaba a su casa tras realizar la denuncia correspondiente. Ortiz la estaba esperando frente a su vivienda a bordo de una camioneta blanca, aparentemente oficial. En ese momento, no solo le cerró el paso sino que la atropelló deliberadamente, retrocediendo para pisarle las piernas. Como resultado, Patricia sufrió la fractura de todos los dedos de uno de sus pies, sumando otro episodio de violencia impune en la provincia.

Un patrón de agresiones constantes

La víctima denunció que esta situación no es aislada. Desde hace tiempo sufre violencia, amenazas y agresiones físicas por parte de un grupo de policías que se reúnen en la casa de su vecina Elsa Mesa. Entre los involucrados se encuentra Maximiliano Mesa, hijo de Elsa, quien también es policía, y el yerno de esta, Nelson Ortiz, el agresor principal en esta ocasión.

"Ellos entran cuando quieren a mi casa, me golpean, se juntan a tomar y consumir frente a mi vereda y se ponen violentos", relató Patricia con desesperación. Además, aseguró que Mesa la había amenazado en varias ocasiones, diciéndole que la iba a "hacer reventar", una advertencia que finalmente se materializó a través de Ortiz.

"Solo estoy esperando que me maten"

Con profunda angustia, Patricia expresó su sensación de abandono y temor ante la falta de acción por parte de las autoridades. "No tengo paz en mi casa. Estoy esperando que me maten nomás. Fui a denunciar y terminó peor, porque esta gente se siente impune por estar vinculada al poder", declaró.

El caso de Patricia Díaz pone nuevamente bajo la lupa el clima de impunidad que reina en Formosa, especialmente en torno al círculo cercano del gobernador Gildo Insfrán. La utilización de recursos oficiales, como vehículos gubernamentales, en un ataque tan brutal y premeditado, subraya la gravedad de los hechos y la urgente necesidad de intervención judicial.

Mientras tanto, la comunidad espera una respuesta contundente que frene este tipo de prácticas violentas y envíe un mensaje claro de que nadie está por encima de la ley, sin importar cuán "pesado"sea, o por más secretos del poder que conosca, o por más cercano a Gildo Insfran que se considere.