El arte del "doble trámite" y la cultura de la burocracia en la gestión Insfrán
Y, si era más dificil?. En Formosa, tierra de maravillas administrativas y sorpresas políticas, presenciamos un episodio digno de una comedia burocrática. La Ministra Secretaria General del Poder Ejecutivo, Cecilia Guardia Mendonca, conocida por su eficiente manejo de las formalidades del Estado y su rápida acumulación patrimonial personal, logró lo impensable: que el gobernador Gildo Insfrán y el ministro Jefe de Gabinete, Antonio Ferreira, firmaran dos decretos distintos para un mismo y usual asueto administrativo.

Sí, leyó bien. No se trata de una normativa de alta complejidad, una reforma estructural o un plan económico. Se trata de algo tan común como el asueto de Navidad y Año Nuevo.
Primero, con la precisión de un reloj descalibrado, la ministra presentó el Decreto N° 470, fechado el 18 de diciembre, donde se establecen asuetos para los días 23, 24, 30 y 31 de diciembre. El documento fue rubricado por Insfrán y Ferreira, quienes, al parecer, confiaron ciegamente en la pulcritud del texto.
Pero horas después, por algún misterioso "error de cálculo", Guardia Mendonca debió corregir su jugada con el Decreto N° 480, que extiende el receso administrativo desde el 26 de diciembre de 2024 hasta el 31 de enero de 2025.
La intención, por suerte porque si hubiera sido más complicado no podemos aventurar que hubiera pasado, según ambos decretos, es que los trabajadores públicos tengan tiempo suficiente para trasladarse a ver a sus seres queridos. Una noble causa, aunque quizá innecesariamente redundante.
Si bien se invitan a municipios, comisiones de fomento, otros poderes del Estado y bancos a adherirse a las medidas. Lo que no explican es por qué fue necesario un doble trámite para resolver algo tan elemental.
Esto lleva a la inevitable pregunta: si para decidir un simple asueto navideño se necesitan dos decretos diferentes y firmados por las máximas autoridades provinciales, ¿qué sucedería si enfrentaran una situación de mayor complejidad, como una reforma estructural o una emergencia imprevista? ¿Cuántos decretos serían necesarios para resolverlo?
Tal vez, el legado de este episodio sea una nueva tradición en Formosa: la doble firma para garantizar que lo obvio se haga oficial. Mientras tanto, los ciudadanos seguimos esperando que la eficiencia administrativa no sea otra víctima de los recesos prolongados .